Desde IFIS Educación, queremos empezar expresando nuestro más sincero apoyo a todas las personas que están atravesando una situación de vulnerabilidad debido a la terrible DANA que vivimos. Además, queremos transmitir un cálido agradecimiento a los y las profesionales que trabajan incansablemente en contextos de emergencia. Su labor es crucial y digna de reconocimiento.
La entrevista, una herramienta esencial
En el ámbito de la intervención social, sobre todo cuando se trata de víctimas especialmente vulnerables —como mujeres en situación de violencia de género, menores, o personas con algún tipo de discapacidad o dependencia—, la entrevista es una herramienta esencial pero desafiante. Aunque en la carrera aprendemos sus fundamentos e incluso hacemos simulaciones, llevarla a la práctica en situaciones reales, y más aún con víctimas vulnerables, plantea retos complejos y únicos.
La naturaleza humana y la entrevista
En estas entrevistas, abordamos a personas que, por lo general, están en modo supervivencia, dominadas por el miedo y la incertidumbre. Nuestro rol implica, no solo, escuchar, sino también reunir información clave para evaluar su situación social y conectarles con los recursos adecuados. Sin embargo, es fundamental recordar que la memoria y la forma en que expresan sus recuerdos están sujetas a limitaciones e influencias. Su relato será una reconstrucción, cargada de interpretaciones y suposiciones, y nunca será perfecto. Nuestra tarea es valorar su testimonio sin esperar una narrativa impecable.
Además, la persona entrevistada hará un esfuerzo inmenso para concentrarse, gestionar sus emociones y confiar en nosotros. Nuestro lenguaje y nuestro tono serán decisivos para establecer una conexión de confianza. Escuchar activamente, adaptando nuestro lenguaje para evitar jergas y tecnicismos, nos ayuda a construir una relación respetuosa y accesible.
Por supuesto, también será un ejercicio de gran concentración para nosotros, dado que nuestra atención estará en hacer las preguntas correctas, respetar los tiempos de la persona, su diálogo, trasladarle la información y asegurarnos de que la está entendiendo y a la vez reforzar esa confianza y la relación de ayuda.
Esencial: el registro de la información recogida
En cuanto al registro de la información, sabemos que el contexto de la intervención social presenta desafíos de tiempo y precisión. Es importante que durante la entrevista intentemos anotar lo esencial, sin depender solo de nuestra memoria. Después, en un momento más tranquilo, debemos consolidar esa información en un formato seguro y organizado, preferiblemente digital, para evitar pérdidas o errores. La creación de un formulario de registro propio puede ayudarnos a estructurar y sistematizar la información de manera eficaz.
Otro reto importante es lograr coherencia cronológica. Las personas entrevistadas, debido al propio proceso de reconstrucción de recuerdos, pueden saltar de un momento a otro, mezclando tiempos y eventos. Reformular nuestras preguntas para ayudar a ordenar los acontecimientos es una técnica útil que facilita la claridad y la precisión y que nos ayudará a situarnos en la situación actual.
Algunas claves relevantes
Finalmente, tal como te contábamos en redes sociales, hay tres errores comunes que debemos evitar para garantizar una entrevista eficaz y respetuosa:
- Evitar preguntas en negativo: Formulaciones negativas condicionan las respuestas e introducen un sesgo en el testimonio.
- Usar lenguaje inapropiado: Escuchemos cómo se expresa la persona y adaptemos nuestro lenguaje para facilitar su comprensión y confianza.
- Dejar de lado la empatía: La confianza y el respeto son la base de la entrevista con víctimas vulnerables. Nuestra sensibilidad al momento y la situación emocional de la persona debe estar siempre presente.
Cuestiones tan básicas, como la prisa y las interrupciones pueden generar un clima hóstil
Conclusión
La entrevista en intervención social es una habilidad que demanda formación continua y práctica consciente. En la interacción con víctimas vulnerables, seremos cuidadosas y reflexivas, conscientes de que cada palabra, gesto y decisión impactan profundamente en su experiencia y en nuestra capacidad para ayudarles de manera efectiva.
